martes, 19 de enero de 2010

Me gustan los martes

ToNgo

Hace unos días mirábamos a la Copa de África para hablar del lamentable suceso al que se enfrentó la selección de Togo. Hoy, me detengo para hablar de un toNgo. Casi igual, pero que una simple letra cambiar por completo el kid de la cuestión. Esto segundo también es lamentable, aunque claro está todo en su justa medida.

A lo que me refiero es que en el día de ayer, Angola y Argelia pactaron el típìco empate que clasificaba a ambos para la siguiente fase teniendo en cuenta el resultado del otro partido del grupo. En esta caso el Malí - Malaui. En este caso, Angola necesitaba de un empate para pasar, y los argelinos también, siempre y cuando Malaui no venciera.

Las noticias que llegaban del otro estadio era que Malí estaba haciendo su trabajo, por lo que un empatito clasificaría a ambos. Y así fue. Un 0 - 0 pactado, y mal ejecutado, ya que según dicen los medios de comunicación, el desenlace fue escandaloso, con ambas selecciones haciendo unos ronditos como si de un entrenamiento se tratase.

Este nuevo suceso empaña el mundo del fútbol, y te hace replantearte algunas cosas. Y como todo, tiene su parte lógica que te hace pensar que... es normal. Es decir, que es moralmente criticable hasta la saciedad, pero si lo piensas, es normal que si con un empate pasan los dos, pues que no se la jueguen.

Por lo tanto, tiene su parte lógica, pero esta clase de acontecimientos ensombrece un deporte tan bonito y peleado, por lo que hay que desterrarse este tipo de actuaciones. Los jugadores deberían actuar siempre de buena fe y sobreponerse a esta clase de sentimientos que hacen venderse por un fácil objetivo. Pero es algo que ha pasado, en el Molinón saben de que hablo, por aquello del Mundial España 82, y que seguirá pasando.

La parte buena es que algunos jugadores africanos de los equipos españoles, como Kanouté del Sevilla o Keita del Barça, vuelven a casa antes de tiempo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Es complicado desterrar todo esto del fútbol.