Muy buena jornada para los colegiados que han pasado totalmente desapercibidos, aunque, evidentemente, siempre se puede resaltar alguna jugada. Destacable en esta ocasión el número de partidos logrados por Manuel Enrique Mejuto González, que supera al navarro Zariquiegui Izco. Ha cumplido su partido número 249 en Primera División en el Málaga - Almería.
Respecto a los encuentros de la jornada, comentar algún detalle. Por ejemplo, la actuación de Rubinos Pérez, al que hay que apuntar un error. El primer gol del Xerez este año llegó ayudado de la mano, y hoy ha vuelto a marcar otro utilizando esa parte del cuerpo. Un despeje de Diego López que impacta en el brazo del delantero andaluz, el esférico que llega a Antoñito, y éste marca el 2-1. Debería de haber señalado la mano. Sí acierta poco después en una expulsión por conducta violenta, una jugada de esas en las que un jugador villarrealense sacó el codito a pasear. Algo parecido hizo Ponzio en el Zaragoza - Racing, siendo expulsado por Estrada Fernández.
En los encuentros del sábado destacar el valencia - Barça. Un partido importante que dirigió el cántabro Pérez Burrull. Su actuación fue correcta, aunque sí me deja duda una amonestación que saca a Piqué, tras detener éste el balón dentro de su área en un saque de puerta. El colegiado le mostró la tarjeta, cuando según el reglamento ahí simplemente debe repetirse el saque. Podría haber sido justificada si la acción se repite o si se considera que pierde tiempo, pero no creo que fuese el caso.
Y curiosa la acción del Sunderland - Liverpool. El árbitro inglés del partido dio como válido el gol de los locales, en una jugada en la que la pelota impacta dentro del área de meta en un balón de playa que llegó de la grada. Un objeto extraño en el terreno de juego que debió de obligar al árbitro a detener el juego y conceder balón a tierra. Pero no lo hizo, ante la atónita mirada de Pepe Reina y sus compañeros.
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